jueves, 25 de diciembre de 2008
"Me llamo Carlos y me van a matar"
miércoles, 24 de diciembre de 2008
FELIZ FREAK NAVIDÁ
2) Surf Nazis Must Die
3) Glen or Glenda
4) Frankenstein's Castle of Freaks
5) The return of the swamp thing
6) Blood Freak
7) Rock 'n' Roll Frankenstein
8) Toxic Avenger
9) Tromeo y Julieta
10) Jail Bait
12) Cannibal The Musical
13) The brain that wouldn't die
14) Jesus Christ Vampire Hunter
15) Live freaky, die freaky
16) Teenagers from Outer Space
17) Attack of the Killer Tomatoes
18) Robot Monster
19) She Freak
20) Bloodsucking Freaks
21) Please Don't Eat my mother
Trailer no disponible en YouTube. Henry tiene 40 años y vive con su madre. Un día, caminando de regreso del trabajo, se encuentra con una anciana que vende plantas. El especimen más desagradable llama su atención y decide llevarla a casa. La planta, llamada Eve, crece y crece... además, puede hablar. El vegetal consigue que Henry la alimente con moscas, gatos y perros. Encima de todo, le pide que le consiga una pareja. Así, Henry encuentra a Adán, la planta perfecta para Eve.
22) Santa Claus Conquers the Martians
23) Manos: The Hands of Fate
24) Hard Rock Zombies
25) Plan 9 from Outer Space
martes, 16 de diciembre de 2008
¡Sócrates! (previo)
Un vistazo al pasado para darle una vuelta de tuerca a tu historia, a fin de mostrar otra cara de los personajes. Recurso literario que en la mejor (y peor, psicológicamente hablando, debido a su trastorno bipolar) época de Virginia Woolf resultó novedoso (vanguardista): ir de atrás para adelante o dando saltos en el tiempo. Recurso apasionante cuando de explicar los orígenes de mentes perversas se trata… de advenedizos geniales en busca de dinero, reconocimiento y poder… a costa de todo y de todos, bueno, casi.
Ugo (así, sin “h”) Conti. Ugo Conti literalmente es un hijo de puta y no un príncipe italiano (¡Sócrates!, diría Macario Schettino, según el maestro Hugo Martínez Téllez, éste sí con “h”); se trata de un trepador que encuentra en
Por el Océano Pacífico, rumbo a Estados Unidos, al lado de su novia-víctima Liz Avrell (viuda de un pionero gringo en la creación de supermercados, o sea, millonarios), hace una escala en Acapulco, donde la crema y nata le organiza una fiesta en su honor. Ahí aprende que
Pero Ugo ni es tan profesional como cree serlo en su actividad —vieja igual que la nobleza misma— ni se llama Ugo —en realidad es tocayo de Mózart—. Ah, y no siempre fue un culero. De niño era otro pedo.
Para mañana habré terminado de leer Casi el paraíso, la historia de Ugo-Amadeo. Ya les contaré en qué termina. El autor es Luis Spota. Por cierto, hablando de hijos de puta, en alguna ocasión Salvador Novo le hizo un epigrama punzocortante a don Guicho, que va más o menos así: Luis Spota lleva en el apellido paterno la actividad materna. Ello lo oí de voz de Hugo, pero Gutiérrez Vega.
(Continuará)
Y la imagen se hizo...
Hace ya casi diez meses que León Krauze me invitó a colaborar en su programa de radio, medio en el que jamás había trabajado. El 20 de marzo se trasmitió la primera entrega de mi sección, a la que el equipo de Hoy por Hoy nombró El Video de la Semana.
Éste ha sido un proyecto que me ha resultado muy placentero, en verdad enriquecedor, por ello debo manifestar mi gratitud por la invitación de León para formar parte de su equipo. Espero estar cumpliendo las expectativas de los radioescuchas, planteando algunos trasfondos sobre el contenido de YouTube. Desde luego, me gusta exponer videos entretenidos, curiosos, sabrosones, pero también ofrecer opciones poco populares, pero no menos interesantes.
El 20 de marzo iniciamos con uno de mis videos preferidos de YouTube. Se trata de la fiesta del Diwali en la embajada de México en India, donde Octavio Paz y Julio Cortázar se conocieron. Un padrísimo video casero en el que se aprecia a los dos escritores convivir, celebrando el festival de las luces del hinduísmo. Creo que fue un buen comienzo ver a Paz y a Cortázar comportándose o intentando comportarse como niños. Fue todo un acierto del documentalista Eduardo Montes-Bradley desenlatar este material y compartirlo con los cibernautas. Tuve la oportunidad de entrevistarlo y publicar la charla en Excélsior. Aquí la liga para hallar el texto.
Además hablamos de temas sobrenaturales, asuntos misteriosos que tanto nos gustan a los mexicanos. ¿Qué tal las imágenes del poltergeist de una tienda de videos mexicana? La cámara de seguridad de un Blockbuster captó el susto que se llevó uno de sus empleados, cuando inexplicablemente las cajas de los DVD se caían. El muchacho no aguantó más al ver que el carrito donde transportaba los videos se movía solo. Otra fantástica aportación de YouTube.
Los documentales no pudieron faltar en el video de la semana. Entre los mejores que mostramos está un estremecedor reporte sobre los niños de la guerrilla en Sierra Leona, chavitos que han sido responsables de las peores atrocidades en aquel país africano. Por conducto del caso de Sherif Koroma, el llamado Captain Cut-Hand, se exponen las crueles acciones del Frente Revolucionario Unido, cómo raptan a menores de edad para incluirlos en sus filas, drogarlos y entrenarlos para matar. Al final, YouTube es reflejo de realidad...
Por ello fue inevitable hablar también de la victoria de Barack Obama y sus videos en YouTube… de la euforia de las celebridades por el triunfo de su candidato...
Me topé con estas imágenes pocos días después de haberse iniciado nuestra sección del video de la semana e hice entre mis conocidos un sondeo sobre quiénes lo habían visto y sus reacciones. Resulta paradigmático lo que uno de mis amigos me platicó, se dio cuenta de que sus sobrinos no despegaban la mirada de la computadora, se mantenían expectantes a pesar de que lo que veían no sólo les causaba repulsión, sino que los asustaba. Luego de platicarme el caso de sus sobrinos, el maestro Víctor Torres me planteó la diferencia entre el miedo y el susto, el primero es una respuesta emocional y el susto se trata de la respuesta física que acompaña al miedo.
Es decir, ahora que nuestros radioescuchas busquen el video irán con cierta predisposición, lo verán con un miedo que se conforma de creencias, con un esquema producto de lo que ellos entienden por temible, o sea, una construcción cultural.
Algunos serán asustados, su ritmo cardíaco se acelerará debido a que la información que reciben la están somatizando. Y eso en parte explica cierto gusto por ser asustados, por esta sensación, no tanto por las imágenes que ven, sino por lo que te provoca fisiológicamente, sin llegar al terror.
Porque no a todos nos gusta saber cómo se preparan las salchichas, sino comerlas, únicamente les comento que este video fue tomado de un documental de 1998 que se realizó en Los Ángeles acerca de los grupos de contra-cultura, que incluía imágenes oscuras, misteriosas y de rareza.
Otro aspecto que me interesó de Obedece a la Morsa son los arquetipos que emplea, por ejemplo, el asunto de las canción infantil, que me remitió a las películas de Freddy Krueger o las cintas japonesas de terror, donde los espectros cobran la imagen de un niño o una niña.
lunes, 8 de diciembre de 2008
El glamour de la locura (I)
Achis, achis. ¿O sea que poseer un "encanto que fascina" (RAE dixit) será siempre-siempre a costa de carecer de compañía y, encima, sufrir el desdén de la gente, mi seductor lector? ¿Está chido ser L'enfant terrible a cambio de resultar un paria? Quién sabe, pero que chingue a su madre la gente si no le late cómo es usted, mi lapidario lector...
Mas hubo una época en la que el anterior era un asunto trascendental, porque los jóvenes tenían sólo de dos sopas, dos estilos de vida resumidos en la siguiente dicotomía: Beegees o AC/DC y párale de contar. Nada de tribus urbanas, mezclas raras y pendejadas de esas... o eras hipster o eras square, punto. Reduccionista el asunto, pero didáctico.
Luego de tu definición (travoltino o rocker), comienza el desmadre en una pendiente cuesta abajo cargada de narcisismo y drogas. Porque los mismos compas (y quién sabe quién a ellos) te hacen creer que una opción excluye a la otra, que son antípodas irreconciliables.
Justamente en esta época surge una obra cargada de ira, que no habla sobre La Juventud, como se ha dicho en muchas ocasiones (sesgo común el de generalizar a la chaviza a partir de un programa de televisión o una revista... o un libro), pero sí de gente joven, de un sector de adolescentes encarnado en Gabriel Guía, el personaje principal.
Hace 40 años José Agustín escribió La Tumba, novela que, debido a su temática y dirección, generó reacciones positivas en escritores reconocidos, Juan José Arreola y Juan Rulfo entre ellos. Sé que eso no es un aval, mi mainstream lector, por ello le daré otros elementos para exponer que se trata de una gran obra.
En primer lugar debe mencionarse que no ha envejecido, que los personajes y las situaciones ahí escritas pueden hallarse aún entre los hijos de políticos, entre los individuos que le dan sentido a las páginas de sociales, pues se trata de las desventuras de un chavo sin problemas económicos (con una beca envidiable que sus padres le proporcionan), que cursa la preparatoria, tiene aspiraciones literarias (al parecer, con talento, al grado que comparan su trabajo con el de Chéjov), se va de fin de semana a Cuernavaca en su carro, se emborracha y liga a chavitas también hijas de políticos ("ganado hembril" extranjero o nacional que padece el severo castigo de ser enviado a estudiar a Europa)... se inscribe en circulosliterarios... ah, y llega a tener relaciones sexuales con sus parientas.
En el camino, el ojete de Gabriel Guía te muestra aspectos del movimiento beat en México (Jack Kerouac y jazz incluidos), escucha a Wagner, cita a Nabokov y se jacta de hablar un perfecto francés... ah, y canta en inglés.
José Agustín consigue que creas en la existencia de su personaje debido a que éste se enamora, llora, se siente derrotado, se levanta, padece resacas físicas y morales. Lo baja del altar que le creó para presentarlo en un principio y lo hace escribir cosas como esta carta que nunca envié:
Yo, que menospreciaba los problemas sentimentaloides, sufro, y mi llanto es la mejor prueba. Primero intenté aguantarme, mordí mis labios, entumecí el cuerpo, mascullé majaderías sordamente, pero luego hice erupción: empecé a llorar con escándalo, sin discreción. Entonces me arrojé en la cama para llorar más a gusto. ¿La causa? Ríete: ... Tus labios estéticos, poesía en rojo vivo, son demoledores.
Ni se te ocurra pensar que este correo es parte de una estratagema chantajista, sería totalmente pueril fijar todas mis esperanzas en un texto mal redactado que destila más de la necesaria miel. Sólo te comparto que me estás haciendo madurar: que ya actué y lloré como niño. Pero ahora me siento afortunado por conservar tu amistad. Que estoy muy agradecido. Ahora temo estar fastidiándote con esto, pero tenía que hacerlo: ya ves, soy un enfadoso... pero soy TU enfadoso.