miércoles, 26 de diciembre de 2007

Hasta un libre pensador...

Hasta un libre pensador desea "feliz Navidá", pero, ¿qué sería de ésta si no hubiera comida? No, este año, no... "Hoy voy a cambiar", según dice la D'alessio (¿así se escribe el apellido de la Leona Dormida?). Este año decidí restringirme y no atascarme, como ha ocurrido durante toda mi vida... así que mi cena constó de:



Así es, señores, faltaba más, faltaba menos, dejaría de ser su pijo y esbirro favorito si no les compartiera mis dosis de literatura y cafeína. Beat y café para pasar una lida Navidá...



Bueno, pero es tiempo de amor, paz, reflexión y sinceridad... Y para que luego no me anden quitando el beneficio de la duda (del que gozo por ser la cruz del sur, soy el que cierra y el que apaga la luz... no, no voy en tren, voy en avión), la neta sí me comí vorazmente una carne...







Bueno, la neta, la neta, esa fue mi cena del 23... porque el 24 me la pasé como cada año: con mi familia. El domingo anterior estuve con mi compañera de departamento, Xian:



Es chida y, como a mí, también le encantan las gordas... sobre todo que tengan mucha pechuga:



No'mbre, con salsa verde, cebolla, crema y queso... las gordas de chicharrón son la neta.

4 comentarios:

Gade Herrera dijo...

Carnalito... ¿gorditas con pechuga? sólo por tu casa venden eso... jajaja

Me alegra mucho que te la hayas pasado chido.

Te deseo lo mejor el próximo año.

Cuidate mucho.

Pável dijo...

Reza el veces el yo pecador.

Después de eso, láxate ese mismo número de ocasiones.

Sólo entonces habrás logrado expulsar ese demonio que suele aglutinarse en tejido adiposo: la grasa.

Recuerde que es mejor un delgado infeliz, que un “gordito“ (arggggghhhh) sonriente.

Pável dijo...

Diablos. La intención era escribir “10 veces“. Eso pasa cuando uno le comenta a usted al mismo tiempo que intenta destruir un (in)feliz matrimonio vía MSN.


Diablos reloaded.

矛盾 dijo...

Los valores de un pueblo pueden medirse en su comida, no solo demuestran el valor que dan a los animales, tambien el respeto al cuerpo propio. Somos lo que comemos, tu decides si ser el granero de la naturaleza o una pila de cadaveres.